Lenguaje de etiquetado de documentos digitales: SGML, XML

Los tres lenguajes de marcaje de documentos: HTML, DHTML y XML responden a tres generaciones que parten del mismo lenguaje de origen el SGML (Standardized Generalized Markup Language). Se desarrollan a partir de funciones y necesidades distintas y a su vez complementarias.
El HTML (Hypertext Markup Language) es un lenguaje de etiquetas hipertextuales. Se basa en el uso de etiquetas concretas que describen las características de estilo y forma de la página web.
En general se trata de un lenguaje que no presenta mucha dificultad de uso. En contraposición destaca por ser un lenguaje rígido y por la dificultad de poder maquetar y posicionar con exactitud los elementos que forman el documento.
En cambio el DHTML o HTML dinámico permiten colocar con exactitud los distintos objetos en la página web . Como su nombre indica se basan en el lenguaje HTML, pero ofreciendo más elementos para “animar” o dinamizar el documento, como son las hojas en cascada y los guiones de programación.
Si bien el lenguaje HTML clásico se basa en texto y etiquetas, el DHTML se basa en la teoría de programación por objetos, dónde todos los objetos tienen una propiedad diferenciadora que es el identificador, y en estructuras complejas que no lo hacen tan accesible ya que para manejarlo es necesario tener nociones de programación. Otro inconveniente del lenguaje DHTML es la inexistencia de un único estándar, ya que la visualización de los elementos puede ser distinta en función del navegador empleado.
Por otra parte el XML (Extended Markup Language) es un lenguaje que se basa más en la descripción del contenido. Tanto el lenguaje HTML como el DHTML están dirigidos principalmente a la descripción formal del documento. Mientras que el XML es un metalenguaje que permite crear nuestros propios lenguajes de marcado y organizar el contenido de los documentos para poder facilitar, posteriormente, la recuperación de la información. El XML recupera del SGML el concepto de DTD (Document Type Definition), es decir la incorporación de un archivo que contiene la definición formal del documento y su estructura lógica, y que es más potente que las hojas de estilo en cascada usadas por el DHTML. Cabe destacar que, hoy por hoy, es un lenguaje que no
acaba de implementarse ya que requiere de unos navegadores mucho más potentes que soporten la totalidad de sus prestaciones.
Como conclusión final remarcar la idea que estos tres lenguajes son complementarios: con HTML podemos definir los contenidos formalmente (negrita, cursiva, tipo de letra, etc.), con DHTML podemos organizar con mayor exactitud los objetos y con XML podemos describir los elementos para recuperarlos posteriormente